Jabón con o sin sosa? Lo que Nadie te Explica al Empezar
Cuando empecé en el mundo del jabón artesanal, tenía una pregunta que no me dejaba tranquila:
¿Es obligatorio usar sosa cáustica para hacer jabón casero?
Había leído muchas recetas que la incluían, pero también veía videos donde decían que se podía hacer jabón “sin químicos”.
Estaba confundida y un poco asustada, como le pasa a casi todo principiante.
Por eso hoy te quiero contar la verdad que nadie te explica al principio: cuál es el rol de la sosa cáustica en el proceso, si es posible hacer jabón sin ella, y qué opción es mejor según tu nivel de experiencia.

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Qué es la sosa cáustica y por qué se usa en el jabón artesanal?
La sosa cáustica (hidróxido de sodio) es un ingrediente esencial para crear jabón desde cero.
Cuando se mezcla con aceites vegetales, ocurre un proceso químico llamado saponificación: los aceites se transforman en jabón real.
Sin la sosa, no hay saponificación. Es decir, no se crea jabón auténtico, solo una mezcla de ingredientes sin reacción.
Aunque la palabra “cáustica” asusta, si se usa con precaución y siguiendo los pasos correctos, el resultado es un jabón seguro, suave y libre de sosa activa.
Entonces, el jabón artesanal contiene sosa cuando lo usas?
Esto fue lo que me tranquilizó cuando lo aprendí:
No. El jabón terminado ya no contiene sosa cáustica activa.
Durante el proceso, la sosa se transforma por completo y desaparece químicamente, dejando solo jabón y glicerina natural.
Por eso, aunque el ingrediente se use en la receta, no queda en el producto final.
La clave es seguir bien las proporciones y el proceso, cosa que aprendí gracias al curso que tomé
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Y qué pasa con los jabones “sin sosa”?
Sí, existen. Pero aquí está lo que nadie te dice:
Cuando alguien habla de “jabón sin sosa”, en realidad está usando una base de glicerina ya preparada.
Es decir, alguien más ya hizo la saponificación por ti.
Usar bases de jabón es válido, especialmente si no quieres lidiar con procesos químicos.
Solo cortas, derrites, agregas aroma o color, y moldeas. Es ideal si quieres empezar de forma más creativa o segura.
Qué opción es mejor para ti: con o sin sosa?
Aquí te va mi opinión sincera basada en mi experiencia:
- Si quieres control total de tus ingredientes, personalizar recetas, ahorrar a largo plazo y aprender desde cero:
haz jabón con sosa cáustica (siguiendo una guía segura). - Si solo quieres experimentar, regalar o vender jabones bonitos sin complicarte con química:
usa bases de glicerina ya hechas, conocidas como “melt and pour”.
En el curso que te recomiendo, te enseñan ambas técnicas paso a paso, para que tú elijas cuál se adapta a ti Haz clic aquí para ver el curso
Mi primer intento y lo que aprendí
Yo empecé con miedo. Me temblaban las manos la primera vez que usé sosa. Pero siguiendo el curso, con guantes, protección y calma, todo salió perfecto.
La textura, el aroma y la calidad del jabón fueron muy diferentes a cualquier cosa que haya comprado.
Después probé también con bases ya hechas, y aunque es más rápido, la satisfacción de crear jabón desde cero no se compara.
Es peligroso usar sosa? Solo si no sabes cómo hacerlo
La realidad es que todo ingrediente mal usado puede ser peligroso, incluso el aceite caliente o el vapor.
Pero con las medidas correctas (guantes, gafas, buena ventilación y un paso a paso confiable), es completamente seguro.
Yo me sentí mucho más tranquila cuando tuve acceso a una guía profesional con explicaciones claras.
Por eso siempre recomiendo este curso: Haz clic aquí y empieza con confianza
Ventajas del jabón hecho con sosa
- Más económico a largo plazo
- Puedes personalizar totalmente los ingredientes
- Se conserva mejor
- Produce glicerina natural que hidrata la piel
- Puedes crear fórmulas especiales para cada tipo de piel
Ventajas del jabón sin sosa (base glicerina)
- No requiere químicos en casa
- Es ideal para proyectos rápidos o creativos
- Menor tiempo de espera (no necesita curado)
- Puedes hacerlo con niños o como actividad familiar
Cuál elijo si quiero empezar a vender jabones?
Depende de tu visión. Si solo quieres vender jabones visualmente atractivos sin tanto proceso, empieza con base de glicerina.
Pero si buscas una marca natural, sólida y profesional, aprender desde cero con sosa es el camino.
Y como te dije antes, puedes aprender ambas técnicas en un solo lugar Accede al curso aquí
Conclusión: no le temas a la sosa, pero aprende con guía
La sosa cáustica no es tu enemiga. Solo es una herramienta más. El problema no es usarla, sino usarla sin información.
Yo le tenía miedo al principio. Pero cuando entendí el proceso, descubrí que no solo era seguro…
también era hermoso.
Si quieres dar el primer paso de forma segura, te recomiendo el mismo curso que a mí me dio las bases para hacer jabones increíbles desde casa:
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Una de las razones por las que muchas personas quieren evitar la sosa cáustica es el miedo a cometer errores. Yo también pasé por eso. Pero lo que descubrí es que el error más grande no es usar sosa, sino no tener una guía adecuada. Por eso, si vas a trabajar con este ingrediente, hazlo con seguridad y con alguien que te lo explique bien, como lo hace el curso que te recomiendo.
Algunas personas piensan que hacer jabón desde cero es algo solo para expertos en química, pero la verdad es que cualquiera puede aprender si tiene las instrucciones correctas. Yo empecé sin saber nada y ahora creo mis propias recetas. Todo cambió cuando encontré una guía paso a paso bien explicada.
El jabón hecho con sosa tiene una ventaja que pocos mencionan: puedes controlar exactamente qué lleva tu producto. No tienes que confiar en etiquetas ni fórmulas comerciales. Sabes qué aceites estás usando, qué propiedades tiene cada uno y qué tipo de piel beneficiará tu jabón. Esa libertad no la tienes al usar bases prefabricadas.
Otra cosa que aprendí es que los jabones hechos con sosa tienden a durar más. Tienen una textura más firme, mejor conservación y una espuma más cremosa. Si quieres crear un producto duradero y de calidad, aprender a usar sosa es la mejor inversión de tiempo.
También noté que el jabón artesanal hecho desde cero tiene mejor aceptación si lo vas a vender como algo natural o premium. Muchos clientes preguntan si el jabón fue hecho con ingredientes reales o si es solo base derretida. Poder responder con confianza que tú misma hiciste todo el proceso da mucha credibilidad.
Por otro lado, si quieres hacer jabones creativos, con formas, colores vivos y detalles estéticos, las bases de glicerina pueden ser una excelente forma de empezar. Especialmente si tu objetivo es hacer jabones decorativos para eventos o regalos rápidos. Y sí, todo eso también se enseña en el curso.
Usar base de jabón no es “hacer trampa”. Es una técnica diferente, más simple, y totalmente válida. De hecho, muchas marcas exitosas empezaron así, aprendiendo con bases hasta que estuvieron listas para pasar al siguiente nivel. Yo misma usé bases durante mis primeros meses y aprendí muchísimo.
Un punto importante es la seguridad. Al trabajar con sosa, es fundamental usar guantes, gafas, y hacerlo en un lugar ventilado. No es peligroso si lo haces bien, pero tampoco es algo para improvisar. Ahí es donde un buen curso hace toda la diferencia. Yo no me habría atrevido a hacerlo sola sin esa estructura.
Hay muchos mitos en internet sobre hacer jabón sin sosa. Algunos dicen que puedes usar bicarbonato, vinagre o limón. Pero la realidad es que ninguno de esos ingredientes saponifica los aceites, por lo tanto, no generan un jabón real. Eso fue algo que me quedó muy claro cuando aprendí con una fuente confiable.
Uno de los consejos más valiosos que recibí fue empezar con lotes pequeños. Así puedes practicar sin desperdiciar ingredientes. Con una receta bien formulada y una cantidad pequeña, te da confianza para seguir avanzando. Eso también me lo enseñaron en el curso y me funcionó perfecto.
Otra ventaja de aprender con guía es que también entiendes cómo corregir errores. ¿Qué hacer si el jabón no traza? ¿Y si se agrieta o cambia de color? Cuando sabes cómo actuar, dejas de frustrarte. Y lo mejor es que no dependes más de adivinar ni de errores al azar.
Si estás pensando en aprender desde casa, sin complicaciones, con explicaciones claras y sin rodeos, mi mejor consejo es este: empieza con una buena base.
Y para mí, esa base fue este curso online. Te explican tanto el método tradicional con sosa, como el método melt & pour con bases listas, todo paso a paso.
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